Hipócrates de Cos sentó las bases para que la medicina se convirtiera en una profesión respetable. Disipando la superstición, las enfermedades se observaban, registraban, diagnosticaban y trataban sistemáticamente según la condición natural del paciente. El Juramento Hipocrático sigue siendo la inspiración ética de los médicos modernos.
Estatua de resina bronceada, acabadas a mano con todo detalle.
Altura: cm 32